Según el informe Jóvenes Españoles 2017 de la Fundación SM, solo un 10% de la población entre 15 y 17 años es católica practicante. Se le puede sumar otro 16% que se declara «católico no muy practicante», que aún va a misa alguna vez. Son pocos, y lo peor es que un tercio de ellos no perseverará: dejará del todo la Iglesia hacia los 22 o 23 años. Dos años después, en 2019, la población católica -sin diferenciar entre la practicante y la no practicante- entre los 18 y los 24 años no superaba el 44%. Aunque hay argumentos que permiten dudar de los últimos datos del Centro de Investigaciones Sociológicas, en 2023 el porcentaje de católicos de entre 18 y 34 años -practicantes o no- era según el organismo un 36,4%.
Transmitir la fe entre los adolescentes es una emergencia para la Iglesia. Uno de los métodos que está funcionando mejor para ayudar a ello es LifeTeen (www.lifeteen.es), creado en Estados Unidos hace más de 30 años y hoy presente en casi 2.000 parroquias del mundo. De hecho, en España LifeTeen ha pasado de encontarse en 1 parroquia en 2011 a 60 en 2017 y 225 en la actualidad. Con música, adoración, catequesis muy cuidadas, equipos de catequistas muy motivados y materiales diseñados por profesionales a tiempo completo, los chicos en LifeTeen se sienten acogidos, amados y se acercan al Señor.
El presidente de LifeTeen, Randy Raus, habló con Religion En Libertad en 2017, de su historia de conversión, de cómo siendo él adolescente, casi sin fe, nunca nadie le habló en serio de Jesucristo y cómo le cambió la vida cuando una chica lo invitó a misa en la universidad y un sacerdote le habló de la Eucaristía emocionado.
Randy Raus volvió a España este mes de febrero de 2019, al Encuentro Europeo de LifeTeen en Montserrat, con un objetivo: animar a los catequistas a ser tan incansables en su amor hacia los chavales como lo es Dios Padre en su amor por sus hijos. «Amor incansable» fue el lema del encuentro, que en la metodología de catequesis que Raus propuso se concreta en 10 claves para acercar los chicos a Dios.
Randy Raus en su alocución a los catequistas de LifeTeen en Montserrat en Febrero 2019.
Estas son sus 10 claves de «amor incansable» que acercan los adolescentes a Dios:
1. Hospitalidad radical
«A cada adolescente le damos la bienvenida a la parroquia personalmente, uno a uno. Una hospitalidad radical significa que como catequista estás radicalmente presente, que dejas lo que estás haciendo cuando un adolescente te pide ayuda y le atiendes. Cuando voy a casa de amigos de LifeTeen en otro país me dan de comer, me dan un dormitorio… pero, sobre todo, veo que la familia para lo que tiene entre manos para ponerse a atender al invitado, adaptándose a él. Eso es la hospitalidad radical: pararse y adaptarse».
2. Llegar a más adolescentes
«No basta con quedarnos en la parroquia y esperar a que vengan los chicos. Hay que salir a invitarlos, hay que buscarlos incansablemente, hay que llegar a más adolescentes. En casa nunca dejarás de pensar: ¿cómo llegar a más chicos?»
3. Reclutar a más «Core Members» (catequistas)
«Hace unos años, en LifeTeen pensábamos que lo bueno era tener un catequista por cada 8 chavales. Hoy pensamos que es necesario tener 1 catequista por cada 5 chavales. Nuestra época es muy hostil a la fe, los chicos están en un entorno muy hostil, así que necesitamos más catequistas, que sean discípulos misioneros. Tenemos que rezar, seguir pidiendo a Dios más miembros para el equipo e invitad a personas nuevas a unirse. No es necesario que sean expertos en nada: el Señor capacitará a los llamados. Han de sentirse llamados y con ganas de ayudar. Tenemos que buscar catequistas así continuamente».
4. «Encuentros WOW!!!»
«Hay que ofrecer experiencias impresionantes, asombrosas y transformadoras, para catequistas y para adolescentes. Pueden ofrecerse en los locales parroquiales, o se puede acudir a santuarios con reliquias, o lugares naturales especiales, como aquí, en Montserrat, a iglesias o sitios impresionantes. Pueden ser peregrinaciones o retiros para jóvenes. La clave es que favorezcan la experiencia de oración transformadora».
5. Misericordia: Dios nos ama ya
«Chavales o catequistas tenemos que permitir que Dios nos ame, tal como estamos. Podemos buscar siempre su misericordia, dejar que nos toque su clemencia, y así los catequistas también seremos misericordiosos con los chicos. Es muy importante favorecer que los sacerdotes puedan tratarse mucho con los chicos de LifeTeen de forma que puedan confesarse con facilidad«.
Raus, durante el encuentro de 2019.
6. Autenticidad: no imites
«Cada persona ha de descubrir quién Dios le pide llegar a ser: ese es nuestro propósito. No tiene sentido compararse demasiado con otros, intentar imitar a otros. Los chavales, además, aprecian a la gente auténtica, a los que no intentan fingir que son otra cosa. Nosotros, como catequistas, intentamos transmitir la gloria de Dios, y esa gloria no ha de esconderse: esa autenticidad ha de estar a la vista».
7. Comunidad: no podemos ir solos
«Vivimos en un entorno muy hostil a la fe y ya no podemos mantenerla de forma solitaria. En nuestra época hay demasiadas resistencias, demasiadas dificultades. Necesitamos hacer cosas grandes y hacerlas en comunidad, caminar en la fe con hermanos. En LifeTeen, tu grupo de catequistas son una comunidad así: no es un «equipo de trabajo» sino hermanos que se quieren, acompañan. Vale la pena quedar para rezar, hacer retiros juntos los catequistas, etc…»
8. Dar al Señor lo mejor
«No dejemos que crezca la mediocridad en nuestro servicio. Si hacemos un servicio por el Señor, hemos de hacerlo mejor, mejores diseños y materiales, hagámoslo de forma que glorifique a Dios. En cada momento debemos hablar con nuestro equipo: ¿como ir mejorando aún más, llegar a más almas, hacerlo con más calidad?»
9. La santidad personal
«Sabrán que somos cristianos por nuestro amor. Uno me dijo “estoy quemado” y le pregunté «¿cuánto tiempo pasas rezando y cuánto pasas con los adolescentes? Quizá rezas poco y pasas demasiado tiempo haciendo programas y papeleos… Si ves que tienes demasiadas cosas y no tienes tiempo para rezar, has de ¡rezar más!» Yo, cuando rezo, constato que el trabajo me sale el doble de rápido. Si no aún tenéis director espiritual, buscadlo incansablemente».
10. Sin miedo: «¡Hablad de Jesucristo!»
«Tened el coraje de hablar a los jóvenes, a los demás, de Jesús, sin miedo. En la Biblia pone en 365 veces “no temáis”. Hablemos sin miedo de la vida de Jesús y de su Resurrección. Sí, eso hoy es contracultural, pero los jóvenes tienen sed de que alguien les hable de Jesús. La gente no deja de ir a la Iglesia cuando les hablan de Jesús, sino cuando les dan mensajes insulsos que no van con ellos».
Este vídeo de 2016 resume bien los puntos fuertes de LifeTeen: atención cercana a los chicos, adoración, música, formación catequética, alegría, sacramentos…
Artículo de hemeroteca publicado originalmente el 13 de marzo de 2019, con datos actualizados.
PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»
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