Hace dos semanas que, en todo el mundo, comenzó la segunda campaña de oración de este año en 40 Días por la Vida , el gran impulso de oración provida en numerosos países.
Alicia Gómez Monedero, su responsable de prensa en España, explica algunos frutos a Religión en Libertad.
Por ejemplo, pocos días después de comenzar la campaña, el abortorio del Puerto de Santa María, en Andalucía, no practicó abortos en la tarde del lunes 2 de octubre.
Los voluntarios, informó Monedero, «pudieron observar que nadie acudía al centro, teniendo conocimiento que estas intervenciones violentas del embarazo se realizan sobre todo los lunes por la tarde o los viernes por la mañana. Son frutos que nos deja ver Dios, por eso tenemos que seguir rezando», concluía la confirmación enviada por WhatsApp.
También destacó de la buena marcha de la campaña en Santander, una ciudad que ha empezado la experiencia de 40 Días por la Vida este año.
Se van cumpliendo sus turnos de vigilia y oración ante Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, en la capital cántabra. Hasta el momento, 117 voluntarios inscritos en esta campaña han realizado cerca de 400 turnos de oración ante este centro.
(Para participar en la campaña en Santander es posible inscribirse desde este enlace, así como escribir a 40diasporlavidasantander@gmail.com o al teléfono 657 410971).
Más interacciones y comunidad entre voluntarios: dos congresos
De forma paralela, la organización también menciona la mejor coordinación entre voluntarios, uno de los principales elementos anunciados por la líder de 40 Días por la Vida en España hace solo unas semanas.
Como ya sucedió en el II congreso nacional celebrado el mes de septiembre en Madrid, cientos de voluntarios han vuelto a darse cita en el que tuvo lugar el pasado 30 de septiembre en Barcelona, tres días después del inicio de la campaña.
El encuentro se inició con la Santa Misa y posteriores palabras del párroco y exorcista barcelonés mosén Lluis Petit, antiguo misionero en Perú. Reiteró que «para luchar por la vida» es necesaria «la fuerza de la Eucaristía y la iluminación de la Palabra de Dios «.
Petit expuso las consecuencias espirituales del aborto en la mujer y en su entorno, afirmando que se comete solo por un motivo: el miedo.
Además, invitó a “mirar a la cara a la verdad y llamar a las cosas por su nombre” y denunció la manipulación del lenguaje y los conceptos, una idea que recalcaron también los demás participantes del Encuentro. Concluyó afirmando que la sanación “viene únicamente del Señor” y que hay que “reconocer la culpa para recibir Su Misericordia”.
Cerca de 200 asistentes acudieron al Congreso de 40 Días por la Vida celebrado en Barcelona el 30 de septiembre.
«Defender, conservar y rezar»
Estuvieron presentes Nayeli Rodríguez, coordinadora nacional de 40 Días por la Vida España, y los coordinadores de las campañas de Barcelona Miquel Audicana e Isabel de Puig.
El médico y profesor universitario Stefano Abbate expuso el proceso mediante el cual el aborto ha comenzado a considerarse, en algunos países, como un derecho.
«El aborto ha conseguido enfrentar a la mujer con su naturaleza”, afirma, y declaró que lo que antes era una vida natural, ahora ha sido sustituida por el hedonismo y la emancipación del hombre respecto de su naturaleza y dignidad humana, que solo puede ser entendida a la luz de Cristo. Frente a esta situación, Abbate propuso defender, conservar y rezar, citando al converso Giovanni Lindo Ferretti.
Cerraron el congreso de Barcelona Alicia Bernal, miembro de la coordinación, la concejal chilena y responsable de la ONG Proyecto Maternity, y Nacho y Olga Uría, que compartieron el emocionante testimonio de su hija Bernardette, diagnosticada con una malformación y fallecida ochos meses después de nacer.
«Tiene que haber un despertar católico»
Gómez Monedero reitera en la necesidad de que «los católicos salgan a la calle», pues en algunos de sus turnos están teniendo mayores dificultades de inscripción. Algo que, sin embargo, no es una novedad para la organización, pues suelen presentarse más voluntarios en las campañas de Semana Santa que en las de otoño.
«Debemos despertar, se nos pide más compromiso. Tiene que haber un despertar católico para salir a rezar, que es lo más necesario: debemos empezar por nosotros mismos», anima.
Durante el comienzo de campaña, están teniendo una especial resonancia y agradecimiento entre voluntarios y coordinadores las palabras de aliento del fundador de 40 Días por la Vida, Shawn Carney.
En la inauguración del II Congreso celebrado en Madrid, Carney destacó como en su primera campaña a principios de los 2.000 los abortos se vieron reducidos en un 28%. Algo que le permite afirmar que, aunque no se vea, la oración pública por la vida «tiene un impacto tremendo».
El CEO de los provida destacó a Hispanoamérica y España como su principal foco de crecimiento institucional. También habló de ellos como lugares fuertemente amenazados por «Estados Unidos e Inglaterra, que les dicen que conocen su amor por la misa, la familia o Nuestra Señora, pero también que dejen de tener hijos».
A juicio de Carney, esta se trata de una «postura arrogante» que debe ser «combatida».
«El demonio es exactamente contra lo que luchamos»
«No luchamos con armas humanas, pistolas o machetes. No las necesitamos. Luchamos por medio de la oración y el ayuno, los medios más poderosos presentes en el Evangelio que Nuestro Señor usó para expulsar demonios», explicó.
Antes de concluir, Carney recordó que el demonio «es exactamente contra lo que luchamos. No son los que trabajan en la industria del aborto, ni las mujeres que piensan en abortar, ni los hombres que quieren pagarle el aborto a sus novias. Luchamos contra el diablo mismo, y lo hacemos con oración, con ayuno y alegría«.
«¡Salid a las calles con pasión, con celo y alegría! Es emocionante pensar que había tantas dificultades el principio en España y que ya hayan quedado atrás. Son, sois, la sal de la Tierra. Cabemos todos contra el aborto. ¡Viva Cristo Rey!«, concluyó.
En los mismos términos se expresó Rodríguez, al animar a los presentes a no caer en la desesperanza.
«No olvidemos que la batalla la tenemos ganada; si Dios envió a su propio Hijo para vencer a la muerte, ¿contra qué tenemos miedo? Eso debería darnos esperanza suficiente para no olvidar que esto es una batalla, pero sabemos cuál es el desenlace. No nos olvidemos de que podemos ver frutos increíbles«.
Precisamente Rodríguez mencionó dos de esos «frutos» antes de concluir: dos niñas que fueron salvadas en la campaña de otoño del año pasado. Sus nombres son Cloe y Alicia y, gracias al testimonio de los orantes de Valladolid, sabemos que sus padres están felices de no haber optado por deshacerse de ellas a pesar de las dificultades».
PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»
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