Este lunes, el director de Religión en Libertad, Álex Rosal, recibirá este lunes, junto a Etsuro Sotoo, escultor jefe del templo expiatorio de la Sagrada Familia de Barcelona, el premio CEU Ángel Herrera en la categoría Difusión de la Cultura Católica.
Con este motivo ha sido entrevistado en El Debate por Álex Navajas, quien recuerda que Rosal ha lanzado numerosos proyectos de evangelización «que siempre se han caracterizado por ser novedosos, rompedores y eficaces».
Entre ellos, como uno de los más recientes, su libro Despierta y combate a los bárbaros que arruinan tu vida (LibrosLibres), un manual de acción en el que decanta más de treinta años de experiencia en el mundo de la comunicación y de la edición siempre con el objetivo de crear una cultura católica.
‘Despierta y combate a los bárbaros que arruinan tu vida’, de Álex Rosal: todo un manual de combate para la batalla cultural.
Un periodismo católico diferente
Con 25 años fue el primer seglar que desempeñó un cargo de confianza en la Conferencia Episcopal Española, como director de la Oficina de Información. De ahí saltó a la delegación de medios del arzobispado de Madrid, donde participó en la creación de Alfa y Omega. Su pretensión en el ámbito de la información religiosa ha sido siempre «interpelar al lector normal», subraya Rosal, «al católico normal que iba a misa o que no… que a lo mejor no tenía mucho interés por los temas propiamente religiosos» y a quien casi todo lo que se le ofrecía era «muy clerical y muy aburrido»: «Queríamos hacer algo diferente que pudiera golpear a ese lector… Algo que tenga un código cultural que sea atractivo para el hombre y la mujer de hoy«.
Se trataba y se trata de «inculturizar la comunicación cristiana, actualizándola», porque era un sector donde primaba una «dinámica de dimes y diretes clericales» muy poco atractiva para el lector común, porque «no dicen nada a su vida, a sus problemas, a su relación con Dios«.
Del exorcista Amorth a Vittorio Messori
Además de esa tarea evangelizadora en la comunicación, Álex Rosal ha desempeñado una intensa labor editorial. Primero, en el Grupo Planeta, donde José Manuel Lara (1914-2003) le acogió para montar la colección Planeta+Testimonio, una colección que, en la forma, transmitiese que «el Evangelio es luz y color y belleza», y en los contenidos fuese «una colección católica fiel al Magisterio de la Iglesia y que, a la vez, tuviera una gran difusión«, adecuando «los temas y los autores a la realidad del momento».
Los directivos de Planeta eran escépticos, porque todo lo que habían intentado sobre cuestión religiosa había sido un fracaso. El nuevo proyecto entendía que aquel tipo de libros del «disenso católico» hacían mucho ruido mediático «y ocupaban mucho espacio en las televisiones y en la radio, sobre todo en las de la cosmovisión de la izquierda», pero no se vendían en las proporciones esperadas porque «no eran libros dirigidos al gran público católico de España«.
«En aquel momento», explica Álex Rosal, «había más de diez millones de españoles que iban todos los fines de semana a misa», un público que implicaba «una demanda que no estaba siendo satisfecha por las grandes editoriales».
Fue así como, en los siete años siguientes, Planeta+Testimonio empezó a ‘trabajar’ autores como la Madre Teresa de Calcuta o Juan Pablo II, o a descubrir a figuras como el padre Gabriele Amorth, exorcista oficial del Vaticano.
«Él era de la congregación de los paulinos. Había escrito ya algunos libros y, curiosamente, en España había como un tabú. Los propios paulinos no querían publicarlo, ni San Pablo, ni las Paulinas. Eso me obligó a ir a Italia, evoca Rosal, «a conocerlo para comprender por qué sus libros no se publicaban, especialmente su gran éxito de ventas, Habla un exorcista. Él me dijo: mira, sinceramente no lo entiendo muy bien, pero eso es algo a nivel de eclesial de España, que no se quiere oír hablar de los exorcistas ni de los exorcismos«.
Se publicó en España y fue un gran éxito, al que siguieron el del cardenal Carlo Maria Martini Vivir con la Biblia («él era un gran especialista y un gran comunicador») o las obras de Vittorio Messori, como Leyendas negras de la Iglesia, del que se vendieron 300.000 ejemplares y ahora ha vuelto a publicar en su propia editorial, LibrosLibres, donde ha continuado la misma tónica de ediciones.
Evangelizar es para todos
Rosal se siente «muy orgulloso» de que una institución como el CEU y la Fundación Ángel Herrera hayan premiado esta trayectoria: «Entiendo que me lo conceden a mi persona, pero también a todo mi equipo. Yo no podría hacer nada sin mi equipo, que en total somos quince personas entre unos proyectos y otros».
Algunos pasajes de la entrevista, en vídeo.
La entrevista se cierra con la esperanza por el notable crecimiento de la Iglesia en el último medio siglo: «Ahora mismo, en la Iglesia hay 1.400.000.000 de bautizados. En el año 70 había solo 600 millones… En África, en 1900 había solo dos millones de católicos; ahora hay doscientos. Y, en diez años, habrá más católicos en África que en toda Europa. Esa es la buena noticia».
«¿Y la mala?», pregunta Navajas: «Que solo hay 400.000 sacerdotes en el mundo entre religiosos y diocesanos para poder evangelizar a esos 1.400.000.000 de bautizados. Ante esta dinámica, yo intuyo que el Espíritu Santo nos está diciendo esa frase del Evangelio de ‘id por todo el mundo y predicad el Evangelio’. Esa frase no solo es para gente consagrada. Tenemos que tomar conciencia de que Dios también nos lo dice a cada uno de nosotros y que cada uno tenemos que hacer algo, tenemos que despertar ese carisma o ese don que todos tenemos, en mayor o menor medida, de comunicadores cristianos, de comunicar la fe, de comunicar el Evangelio, de comunicar el cristianismo. Yo creo que es el momento en que los seglares podemos dar un paso adelante y convertirnos en pequeños comunicadores cristianos«.
Pincha aquí para leer la entrevista íntegra en ‘El Debate’.
PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»
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