Un seminarista de la diócesis nigeriana de Makurdi se salvó el lunes por los pelos de morir cuando el coche en el que viajaba fue tiroteado por pastores islamistas fulani. El joven ha manifestado que espera que algún día los criminales se conviertan y se ponga fin a las matanzas que sufren los cristianos en su nación.
More Stories
¡Bienaventurada tú, María!
La impresionante lucha de fe que tuvo con 12 años el «joven más anciano del mundo», recién fallecido
Tres obispos belgas critican las palabras del Papa sobre el aborto y el Rey Balduino