Desde su ordenación en 1991, Ernesto María Caro, sacerdote de la diócesis de Monterrey, no se había encontrado en confesión con un caso tan espantoso.
]]> PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»
Desde su ordenación en 1991, Ernesto María Caro, sacerdote de la diócesis de Monterrey, no se había encontrado en confesión con un caso tan espantoso.
]]> PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»
More Stories
Un informe demuestra cómo ha crecido la presión de la ONU a favor del aborto y la ideología de género
POR LO QUE DEBE PREOCUPARSE EL SACERDOTE
Arrio, el arrianismo, y el Concilio de Nicea