Hemeroteca Laus DEo25/07/2023 @ 02:52
El Arzobispo Paul Coakley de Oklahoma City respondió a la ejecución en Oklahoma del convicto asesino Jemaine Cannon con un llamado a la abolición de la pena de muerte, a la que denominó «un castigo arcaico». El obispo también pidió oraciones por el hombre ejecutado, su víctima y sus familias.
More Stories
Israel pide al Papa que condene explícitamente a Hamás
«No podemos decir que todas las religiones llevan a Dios. Eso contradice a Cristo»
El profesor Alberto Bárcena analiza la persecución religiosa y secularización del Trienio Liberal