«¿Pues qué fiel podría albergar alguna duda de que en el momento mismo del sacrificio eucarístico, a la voz del sacerdote, se abren los cielos; y de que en el misterio de Jesucristo asisten los coros de los ángeles, las profundidades se juntan con las alturas, la tierra se une a los cielos y de lo visible y lo invisible llega a hacerse una sola y misma cosa?»
San Gregorio Magno.
Diálogos.
PUBLICADO ANTES EN CATOLICIDAD
More Stories
El número de jóvenes católicos practicantes en Inglaterra y Gales dobla al de los jóvenes anglicanos
Las «monjas rosas», un siglo de adoración ininterrumpida que sostiene la fe en tiempos de crisis
Vuelven los comulgatorios en EE.UU: cada vez más iglesias instalan barandillas en torno al altar