Durante la Audiencia General celebrada hoy en la Plaza de San Pedro, el papa Francisco reflexionó sobre el Espíritu Santo, subrayando su papel esencial en la unidad y expansión de la Iglesia. Recordó cómo, desde Pentecostés, el Espíritu impulsa a los cristianos a anunciar el Evangelio y construir la unidad en la diversidad.
More Stories
Baja el número de polacos que se declaran católicos y los que son practicantes
Dios ha tocado todos los palos del dolor
La Iglesia recuerda que no existen los «desbautismos»