El cristianismo llevó a la máxima expresión la compasión, un elemento diferencial de una fe que sufre con el que sufre y que introdujo algo único: el amor al enemigo. Sin embargo, hoy la ética de la compasión vive una profunda crisis, que precisamente va unida a una secularización galopante.
]]> PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»
More Stories
Algunas ideas para no sobredimensionar el papado
Zanchetta está de vuelta en Argentina para cumplir lo que le resta de condena
El obispo Barron con Tucker Carlson: «La IA es aterradora, o tiene una base moral o es Frankenstein»