«Un ángel llamado Rebeca», la película de José María Zavala sobre una joven que «tocó el cielo»

Dirigida por José María Zavala y producida por los hermanos Borja e Inés Zavala, la película Un ángel llamado Rebeca se estrenará próximamente en cines distribuida por European Dreams Factory. Es la tercera película en la filmografía de estos dos jóvenes productores, de 23 y 22 años respectivamente, tras las exitosas cintas El Cielo no puede esperar y El latido del Cielo, ambas sobre el beato italiano Carlo Acutis.

En esta ocasión, Borja e Inés Zavala abordan la historia de Rebeca Rocamora Nadal (1975-1996), una joven catequista parroquial nacida en Granja de Rocamora (Alicante), donde falleció a consecuencia de un cáncer cuando tenía 20 años, y cuya fama de santidad se extendió desde el primer momento. En 2009 se abrió su proceso de canonización, cuya fase diocesana concluyó en 2012.

Declarada Sierva de Dios por la Santa Sede, enfermó de gravedad por primera vez con un tumor en la hipófisis cuando solo tenía diez años, aunque se curó y pudo llevar una vida normal de creciente implicación en su parroquia. Poco antes de morir se le detectó un glioma incurable que produjo su fallecimiento en muy poco tiempo.

Rebeca Rocamora, cuya vida e impacto sobre la vida de otros recoge la película ‘Un ángel llamado Rebeca’, que será estrenada próximamente en cines.

En ambos casos aceptó sus sufrimientos con una sonrisa siempre en los labios y una preocupación permanente por hacer felices a los demás, empezando por su propia familia y amigos. Frecuentaba los sacramentos, adoraba a Jesús en la Eucaristía y mantenía un trato filial con la Virgen María cimentado en el Santo Rosario. 

José Ignacio Munilla, obispo de Orihuela-Alicante, comenta que una de las mayores alegrías al tomar posesión de su nueva diócesis a principios de 2022 fue encontrarse con el proceso de Rebeca en marcha, y ahora participa en esta primera película sobre ella junto con el postulador de su proceso de beatificación, José Cristóbal Moreno, y la hermana Milagros, religiosa carmelita curada por su intercesión ante la estupefacción de los médicos.

En Un ángel llamado Rebeca salen a relucir también los testimonios de la madre de Rebeca, María del Rosario Nadal, y de sus tres hermanas: Laura, Rosa y Lourdes, las cuales desbrozan anécdotas desconocidas de la Sierva de Dios desde su más tierna infancia. La implicación de la familia y de los responsables eclesiásticos del proceso en esta primera película sobre Rebeca es total, igual que la de sus amigos y compañeros de clase y catequesis, o la de los vecinos de Granja de Rocamora, pues Rebeca tuvo siempre fama de santidad en vida. La película servirá también para impulsar su proceso de beatificación, cuyo primer milagro se estudia ya en Roma. La cinta ofrece también dos filmaciones originales de Rebeca, junto con documentos e imágenes inéditas de su vida familiar y de sus experiencias con amigos.

José María Zavala (sentado) y Miguel Gilaberte, en un momento del rodaje de ‘Un ángel llamado Rebeca’.

Dirigida y escrita por José María Zavala (El misterio del Padre Pío, Wojtyla. La investigación, Amanece en Calcuta o El Cielo no puede esperar), la película cuenta una vez más con la fotografía del académico Miguel Gilaberte (Velvet, Alta Mar, Ágora o la serie Los enviados para Paramount Chanel). La banda sonora original es de Bruno Valenti, compositor de Halkara, película nominada a los Oscar 2024, y el montaje de Jordi Azategui, que ha trabajado en las principales películas de la aclamada directora Isabel Coixet, la última de las cuales, Un amor, es una de las favoritas a los Premios Goya 2024.

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