En Viena, capital de Austria, se asiste a un ejemplo más de la deriva apóstata de los países europeos que en su día fueron cristianos. El dinero público de los ciudadanos vieneses se va a dedicar a la creación de un centro para los jóvenes LGTBIQ.
En Viena, capital de Austria, se asiste a un ejemplo más de la deriva apóstata de los países europeos que en su día fueron cristianos. El dinero público de los ciudadanos vieneses se va a dedicar a la creación de un centro para los jóvenes LGTBIQ.
More Stories
Por primera vez en Madrid, tres cardenales en tres templos celebran la Vigilia de la Inmaculada
10 enseñanzas para vivir la fe en familia y contagiarla dando ejemplo a los hijos
SALVEMOS A NUESTRA PATRIA Y A NUESTRA FAMILIA