24/12/2024

21 países de la UE castigan la «blasfemia», incluso con penas de prisión: España puede quedarse sola

PSOE y Sumar acaban de acordar eliminar el delito contra los sentimientos religiosos, algo que convertiría a España en un caso muy raro dentro de la Unión Europea.

El Observatorio para la Libertad Religiosa y de Conciencia (OLRC) publica un informe, titulado «La protección legal de la libertad religiosa en la Unión Europea«, en el que se puede comprobar que un total de 21 de los 27 estados miembro de la Unión Europea (es decir, todos salvo Irlanda, Suecia, Estonia, Francia, República Checa y Croacia) sancionan las ofensas a los sentimientos religiosos de los ciudadanos. Además, Grecia castiga la blasfemia.

Por otra parte, todos los países que tipifican los delitos contra los sentimientos religiosos pueden sancionar estos con penas de prisión.

Desamparo de los creyentes

María García, presidenta del Observatorio para la Libertad Religiosa, destaca: «Con este Gobierno, los creyentes son ciudadanos de segunda con menos derechos. A partir de ahora va a salir completamente gratis mofarse de las personas que practican una religión. La libertad religiosa es el único derecho fundamental en el que se pone en duda la persecución de delitos contra ella».

«Con este acuerdo, el Ejecutivo se desvía de la protección legal de la mayoría de los países de la Unión Europea. Mientras este Gobierno protege a otros colectivos, deja en el desamparo jurídico a los creyentes«, explica María García.

«El Convenio Europeo de Derechos Humanos, ratificado y por ende vinculante para todos los Estados miembros de la Unión Europea, reconoce y garantiza el derecho fundamental a la libertad religiosa en su artículo 9, lo cual obliga a todos los Estados firmantes a protegerla», afirma el Informe.

Como se puede comprobar en dicho documento, tanto Alemania como Bulgaria sancionan los delitos contra los sentimientos religiosos de los ciudadanos con penas tres veces más severas que España.

Por su parte, un total de nueve países (Croacia, Chipre, Eslovaquia, Grecia, Italia, Letonia, Lituania, Polonia y Rumanía) lo hacen con penas dos veces más severas que España. Finalmente, otros nueve países (Austria, Bélgica, Bulgaria, Eslovenia, Finlandia, Luxemburgo, Malta, Países Bajos y Portugal) sancionan este tipo de los delitos igual que España lo ha hecho hasta ahora.

Además, la protección legal de los sentimientos religiosos de los ciudadanos no es exclusiva de la Unión Europea, pues otros códigos penales lo prevén en todo el mundo. Este es el caso de Suiza, Nueva Zelanda, Brasil, Panamá, Paraguay, República Dominicana y El Salvador.

El Informe recoge también algunos de los últimos ataques a los sentimientos religiosos en España en los últimos meses, como el robo de crucifijos en 20 cementerios de Toledo o las declaraciones del locutor de la Cadena Ser Héctor de Miguel «Quequé», en las que pedía «llenar de dinamita la Cruz del Valle de los Caídos para hacerla volar por los aires, preferiblemente en domingo, que hay más gente».

PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»