Ataques, madres salvadas por bebés y obispos rezando: 40 Días por la Vida encara su final de campaña

40 Días por la Vida, la organización dedicada a la oración por la vida ante los abortorios surgida en Texas (EE.UU.) en 2004, acaba de cruzar el ecuador de su campaña mundial de Cuaresma, iniciada el pasado 14 de febrero y que finaliza el próximo 24 de marzo.

Según los últimos datos oficiales de los que dispone la organización, son al menos 92 los bebés que han sido salvados a lo largo de esta campaña de Cuaresma, aunque el «rescate» como tal no se contempla en sus líneas de actuación. Como se puede ver en los testimonios, son las mujeres que acuden a las clínicas las que dan el paso de acudir a los orantes.

Los datos para participar en las campañas de 40 Días por la Vida están disponibles en su página web.

El éxito de la campaña no se ha hecho esperar: el primer día, 14 de febrero, la delegación canadiense de 40 Días por la Vida celebraba que la presencia de los «guerreros de la oración» ya no sería necesaria ante la icónica clínica Morgentaler, en activo desde hace tres décadas. Ya hace diez años comenzó a mostrar signos de fatiga, pero como indica la organización, los problemas financieros se acentuaban a medida que se sucedían las campañas, hasta que estos se volvieron «insoportables». Es, según los militantes, el primer abortorio canadiense que cierra en décadas.

Primera campaña en Francia y Jamaica

Francia también comienza sus primeros 40 Días por la Vida. Los primeros voluntarios comenzaron a rezar frente al hospital Cochin, en el distrito 14 de París. El lugar de la vigilia, 92-94 boulevard du Port Royal, ha sido elegido por el número de abortos que se practican en ese hospital, que parece ser donde más abortos se practican en el país.

La campaña ha coincidido con la incorporación del aborto en la Constitución de Francia, algo que pone al país al nivel de la dictadura comunista de Tito en Yugoslavia, único país que hizo algo similar. Menos de un 10% de sus diputados y senadores se mostraron en contra.

También se estrena campaña en Jamaica, donde el aborto es ilegal: según fuentes de la organización, el personal del «centro médico» tiende a mostrarse agresivo con la vigilia desde el primer día, lo que es respondido con la oración de los presentes.

La primera vida salvada, en Panamá

La primera vida salvada por la oración ha sido en esta ocasión en Panamá. Concretamente fue el segundo día de campaña, el 15 de febrero.

Jenny, una de las coordinadoras de la campaña de la Ciudad de Panamá, se convirtió en una de las protagonistas de esta primera historia al recibir una llamada de una mujer que había recibido un folleto de 40 Días por la Vida y cuya hija estaba pensando en abortar. Tras contactar con la hija, Jenny no percibió ninguna señal de que fuese a renunciar al aborto, pero tras pedir a su equipo que redoblase sus oraciones, llamó nuevamente a la mujer: su hija había elegido la vida y agradecía a Jenny y su equipo la labor de oración y ayuda. 

Una de las militantes de 40 Días por la Vida en Panamá, celebrando la primera vida salvada de esta campaña de Cuaresma. 

Segunda campaña en la Polonia de Tusk

En Polonia, el equipo inicia su segunda campaña, en un país donde, al margen de abortorios, las mujeres compran pastillas para abortar en casa. En redes sociales están compartiendo testimonios.

Reino Unido: las zonas burbuja no impiden que se salven vidas

En Reino Unido, las llamadas buffer zones, zonas burbuja o espacios de amortiguamiento, que obligan a los provida a rezar a amplia distancia del abortorio, ganan terreno desde hace meses. Sin embargo, no son obstáculo para el poder de la oración: no había pasado una semana de campaña cuando los orantes de Ealing tuvieron constancia de un sorprendente testimonio de una mujer que habría renunciado al aborto tras contactar con 40 Días por la Vida la anterior vigilia. Una decisión meritoria a juicio de la organización provida, pues no solo contaba con la oposición de su novio y su familia, sino que estos trataban de envenenarla para inducir el aborto.

«Ella está muy feliz y agradecida y trajo a su bebé de una semana al evento de inauguración de la campaña en Ealing «, dijo Robert Colquhoun, director de campañas internacionales.

Primera vida salvada en España

Otra de las primeras vidas salvadas fue en España. Concretamente el 9 de febrero, quinto día de campaña, cuando un orante vio acercarse a tres mujeres al abortorio, entrando dos de ellas -una embarazada de siete semanas– y quedándose fuera la tercera, que se acercó a hablar con el orante. Horas más tarde, las tres jóvenes se encontraron de nuevo con el voluntario. Tras ponerlas en contacto con Red Madre, la joven embarazada confirmó el octavo día de campaña que continuaría con la gestación del bebé.

La importancia de buenos letreros, mensajes y carteles

El sexto día de campaña mostró cómo la astucia de los orantes y sus icónicos letreros pueden ser determinantes. Informan de ello los representantes de la campaña de Rockford, en Illinois (Estados Unidos): era el turno de una joven pareja para entrar al abortorio cuando contemplaron un cartel que nunca olvidarían: un bebé por nacer junto a un niño uniformado de azul que dice: «Este soy yo… pero mucho más pequeño«.

El letrero pareció no tener mayor repercusión hasta que, minutos más tarde, los padres salieron del abortorio e informaron a los responsables de 40 Días por la Vida que renunciaban a su intención de abortar, después de hacer alguna foto al cartel que había salvado la vida de su hijo.

`Este era yo… mucho más pequeño´: unas pocas palabras, un cartel y la oración confiada salvaron, que se sepa, una vida en Illinois. 

«La pareja se llenó de alegría, felicidad y vida, e incluso se quedaron unos minutos con el orante. Toda alabanza y agradecimiento a nuestro Señor Jesús y gracias a todos los voluntarios de 40 Días por la Vida en todo el mundo y en Rockford», escribió Kevin, líder de 40 Días por la Vida de Rockford. 

Veinte campañas para ver cerrar un abortorio

En el octavo día de campaña, los voluntarios de Arkansas celebraban tras más de 20 campañas de oración -generalmente se realizan dos campañas anuales- que el abortorio local de Little Rock cerraba sus puertas para siempre, poniéndose a la venta y dejando un único abortorio en activo en la localidad en posesión de Planned Parenthood. Poco después, el 22 de febrero, el portal internacional de 40 Días por la Vida confirmaba el  cierre del abortorio NUPAS de Stockport, Manchester, en Reino Unido. 

Militantes de 40 Días por la Vida en Manchester, en una de las campañas del  ya clausurado abortorio de Stockport.

Un rescate a la inversa: el bebé salva a la madre

El día 11 de campaña, Maryland confirmó lo que podría llamarse un «rescate a la inversa». Según informan los registros de 40 Días por la Vida, hacía meses que una mujer estaba gravemente enferma y la única forma de tratarla suponía la muerte del bebé. Ella, relata su padre, Tom, «encontró otro médico dispuesto a abordar su embarazo de alto riesgo, dio a luz a una preciosa niña y le diagnosticaron cáncer».

Tal y cómo destacó el mismo Tom, voluntario de 40 Días por la Vida, el diagnóstico solo fue posible tras detectarlo durante el embarazo y no haber abortado, por lo que la madre le dice hoy a su hija: «Has salvado la vida de mamá y yo te la he salvado a ti«. Hoy, Tom acude a las vigilias con una camiseta con la cara sonriente de su nieta y el mensaje de «el médico dijo que abortase», mientras celebra también que su hija lleva 5 años libre de cáncer.

`El médico dijo: aborta´, el mensaje que acompaña el rostro de una pequeña que se salvó del aborto y salvó la vida de su madre. 

España celebra nuevas vidas y nacimientos

No fue el único motivo de alegría: el mismo día, la página oficial de 40 Días por la Vida celebraba que en España -uno de los lugares «que más persecución estatal han experimentado» los provida- se siguen salvando bebés. Y concretamente, anunciaban que la primera semana de campaña habían nacido dos bebés rescatados en la vigilia de otoño.

El 27 de febrero, día 14 de campaña, España fue testigo de su segundo rescate confirmado de la campaña. Las redes sociales relatan como una pareja se disponía a abortar, muy cerca de los voluntarios, que rezaron «expresamente por ellos» mientras veían cómo ella «se echaba a llorar». Tras varios cruces de miradas, la pareja se alejó del abortorio y uno de los voluntarios fue a ofrecerles ayuda. «Parecían aliviados. Me gustó mucho que cuando les di el folleto de ayuda, él también estaba llorando agarrado a ella«, relató el voluntario.

Una imagen vale más que mil palabras

Los archivos de 40 Días por la Vida también recogen la importancia de mostrar la realidad de lo que es un feto y el aborto, porque «cuando la gente sabe qué es el aborto y qué es un feto, rechaza el aborto«. La prueba se dio el día 15 de campaña cuando una madre y su hija se pararon ante un molde que representaba un feto colocado por los voluntarios. Al ver a la madre e hija, la líder de campaña, Nikki, pensó que «estaban molestos» por la imagen, pero al acercarse les vio llorando.

«Su madre la estaba animando a abortar, pero ella no se sentía bien al respecto. Estaba en conflicto. Maggie pudo tranquilizarla y animarla… ¡y la mujer cambió de opinión y eligió la vida! Seguid rezando para que se mantenga firme en su decisión», relata la coordinadora de campaña.

Frutos que no se ven ni contabilizan, pero que existen

Esta campaña también está dando muestras de ánimo a aquellos que no ven resultados palpables de su oración. Un ejemplo fue durante el decimosexto día de campaña, en Oklahoma, cuando el líder de la campaña de oración  recibió a un transeúnte que quería compartir una historia desconocida por completo para los voluntarios.

«Un hombre pasó para decirles a los voluntarios que su hijo está vivo hoy porque vieron a los voluntarios en la acera el día que tenían programado un aborto. Dio las gracias a los voluntarios y les dijo: Seguid haciéndolo».

Pastores que guían y fortalecen al rebaño

Esta campaña también ha mostrado la importancia que puede llegar a tener un obispo al frente de los fieles en estas iniciativas. Concretamente ocurrió durante el día 19 de campaña, en Oakland (California), cuando el obispo Michael Barber celebró una misa en el marco de la campaña de 40 Días por la Vida y procesionó más tarde junto al clero hacia el abortorio de Planned Parenthood, ante los intentos de boicot de empleados y abortistas. «De lo que no se dan cuenta es que nunca podrán apagar el poder de la oración , ni el espíritu de quienes están llamados a hacer la obra de Dios. ¡Qué bendición tener a tantos con nosotros defendiendo la vida!» escribió Jodie, miembro de la organización.

El día 20 de campaña, 40 Días por la Vida ya celebraba las 76 vidas salvadas, destacando entre ellas al hijo de una joven de Duitama (Colomba), que entonces pensaba en abortar. Tras hablar con un psicólogo recomendado por la organización, «la joven decidió contárselo a su madre y continuar con el embarazo», confirma Lourdes Varela, directora de campañas en Hispanoamérica.

El mismo día, los voluntarios de 40 Días por la Vida en Valladolid tenían constancia de un nuevo bebé salvado. «Una semana antes de que comenzara la campaña, una voluntaria estaba rezando cuando tres chicas llegaron al abortorio. Una quería abortar y entró en busca de información. Las otras dos esperaron afuera y empezaron a hablar con el voluntario de 40 Días por la Vida». Cuando la joven salió, sus amigas le presentaron al voluntario, que le ofreció ayuda. Hoy, la joven confirma proseguir el embarazo.

Miembros de 40 Días por la  Vida en Valladolid (España). 

Persecución violenta en Alemania

40 Días por la Vida también sufre persecución. Y no solo legal o administrativa. Tal y como informó el 1 de marzo Tomislav Čunović, abogado y director ejecutivo de 40 Días por la Vida internacional, la vigilia de oración de Frankfurt am Main fue gravemente atacada por unas 20 personas en pleno rezo de rosario, tratando de «silenciar la conciencia cristiana que nos recuerda el mandamiento divino `No matarás´». La agresión no pasó de gritos, acoso, insultos, provocación e intimidación, ante la firmeza y oración de los voluntarios. La policía no llegó pasados los 20 minutos, cuando los agresores se dispersaron.

Salvando vidas de la eutanasia y el suicidio

Las de los fetos y bebés no son las únicas vidas que salva la oración en el marco de estas campañas. De hecho, la eutanasia comienza a sufrir sus primeras derrotas, como se pudo ver el día 22 de campaña en México, cuando una familia se acercó al grupo de voluntarios. La madre había sido hospitalizada por una grave enfermedad, y los médicos le sugerían la eutanasia ante la perplejidad de sus familiares. Fue entonces, ante la invitación de los voluntarios de rezar en uno de los turnos,  cuando «todo cambió». «Rezaron con fervor. La familia no sólo optó por no aplicar la eutanasia a su madre, sino que la anciana se recuperó, fue dada de alta del hospital y regresó a casa con sus seres queridos», confirmó Lourdes Varela, directora de campañas latinoamericanas de 40 Días por la Vida.

Semejante caso sucedió en Perú, cuando una joven se acercó a un voluntario de Lima anunciando que se iba a quitar la vida. «Gracias a Dios había alguien allí para escucharla y aconsejarla. Está muy agradecida. Seguimos comunicándonos con ella. ¡Dios nos permitió salvar otro tipo de vida!», confirmó Varela. 

Esta semana también se celebra la marcha `Sí a la vida´ ,  que tendrá lugar el día 10 de marzo a las 12:00 horas en la calle Serrano (esquina con la calle Goya) para concluir en la Plaza de Cibeles, con Paseo de Recoletos.

Ofrecemos más detalles sobre la próxima marcha provida del 10 de marzo convocada por la plataforma Sí a la vida, con la que se puede colaborar a través de donativos o inscripción como voluntario. 

PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»