En Estados Unidos, a medida que concluyen las legislaturas presidenciales, es costumbre que el mandatario haga entrega de la Medalla Presidencial de la Libertad, la máxima condecoración civil que se puede entregar en el país.
Conforme se acerca la toma de posesión del presidente electo Donald Trump, el saliente Biden comienza la entrega de las medallas a los galardonados, que incluyen a personajes públicos como Hilary Clinton o Denzel Washington, pero también a otros tan dispares como el magnate George Soros y el Papa Francisco.
Biden siempre se ha declarado «católico», si bien durante su mandato ha impulsado el aborto, la ideología de género y trans, y ha apoyado a las ideologías que buscaban recortar la libertad religiosa en el país.
Las primeras entregas tuvieron lugar el pasado sábado 4 de enero, en la sala este de la Casa Blanca, donde fueron galardonados 19 personajes y celebridades públicas en reconocimiento a su participación política, en el entretenimiento o incluso en la promoción de privilegios woke y LGBT.
“Por última vez como presidente tengo el honor de otorgar la Medalla de la Libertad, el mayor honor civil de nuestra nación, a un grupo de personas extraordinarias, verdaderamente extraordinarias, que dieron su sagrado esfuerzo, su sagrado esfuerzo, para dar forma a la cultura y la causa de Estados Unidos”, dijo Biden en antes de la entrega.
Soros, campeón woke y filántropo
Uno de los galardonados más polémicos fue el magnate y filántropo húngaro George Soros, reconocido por el gobierno de Biden como “inversor, filántropo y fundador de Open Society Foundations”.
“A través de su red de fundaciones, socios y proyectos en más de 120 países, Soros se ha centrado en iniciativas globales que fortalecen la democracia, los derechos humanos, la educación y la justicia social”, se leía en el portal de la Casa Blanca.
En el caso de Soros, esas “contribuciones” se han plasmado en un declarado apoyo al aborto con sumas millonarias: solo en 2020 dedicó al menos 3,5 millones de dólares a impulsar las campañas de candidatos abortistas en los Estados Unidos.
El mismo año se demostró cómo una buena parte de los jueces permanentes del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, al menos 22 de 100, habrían estado estrechamente relacionados con el magnate, sus ONG y la cosmovisión de izquierda radical de la Open Society Foundation, entreviéndose un claro tráfico de influencias.
Hasta 2024, la misma organización fue una de las grandes financiadoras de la promoción de los llamados derechos reproductivos y las doctrinas woke en toda la Unión Europea, lo que solo cesó cuando la misma Open Society observó que varios estados miembros ya dedicaban los suficientes recursos para dicha promoción.
“Como inmigrante que encontró libertad y prosperidad en Estados Unidos, me siento profundamente conmovido por este honor”, expresó el magnate en diferido, después de que su hijo y heredero Alex Soros recibiese en su nombre la condecoración.
Biden: Francisco, «el Papa del pueblo»
Por su parte, el Papa Francisco también ha sido seleccionado como merecedor de la Medalla Presidencial de la Libertad, siendo su caso el primero en que se entrega dicha medalla “con distinción”.
En el caso de Francisco, el comunicado de la Casa Blanca valora sus primeros pasos como sacerdote, cuando “durante décadas, sirvió a los que no tenían voz y eran vulnerables en toda Argentina. Su misión de servir a los pobres nunca ha cesado”.
El texto presidencial también valora a Francisco por ser “un pastor amoroso que responde con alegría las preguntas de los niños sobre Dios”, pero también “un maestro desafiante” que llama a luchar por la paz y proteger el planeta” y “un líder acogedor que tiende puentes hacia diferentes religiones”.
“El Papa Francisco, el primer Papa del hemisferio sur, no se parece a ningún otro que lo haya precedido. Él es, por encima de todo, el Papa del pueblo: una luz de fe, esperanza y amor que brilla intensamente en todo el mundo”, reza el comunicado.
En muchos aspectos, Francisco es la antítesis del magnate húngaro, contando con un sinfín de declaraciones, documentos e iniciativas que el pontífice ha desarrollado para advertir y concienciar frente al aborto o la ideología de género.
A principios de esta semana, Biden canceló su viaje a Roma y una visita al Papa Francisco para abordar los incendios forestales mortales en California. Biden tenía previsto viajar a Roma del 9 al 12 de enero por invitación del Papa Francisco. Su audiencia con el Santo Padre estaba prevista para el 10 de enero.
Biden se reunió por última vez con el Papa Francisco en junio del año pasado, encuentro en el que ambos conversaron sobre política exterior en Israel, Gaza y Ucrania, así como sobre el cambio climático.
PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»
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