Alertó sobre las reformas mal entendidas, la crisis post-conciliar, la gestión de los casos de abusos, mencionando tanto a McCarrick como a Rupnik y su preocupación por cómo se está manipulando la sinodalidad, especialmente con el método denominado «Conversación en el Espíritu». Con ironía, se preguntó: «¿Esperar las sorpresas del Espíritu? ¿El Espíritu ahora te dirá que estaba equivocado durante 20 siglos y que ahora te va a decir la verdad?».
More Stories
Camisasca, de CL: «La Anunciación a María», obra de Claudel que hay que leer «al menos dos veces»
«Consagró, tuvo dudas y empezó a brotar sangre del cáliz»
Juan Caramuel, el obispo matemático español que se adelantó a Leibniz con el sistema binario