Nuevo escándalo en el Vaticano: desde que Robert Prevost fue nombrado prefecto del Dicasterio para los Obispos en 2023, se han multiplicado los intentos de borrar el rastro de su encubrimiento de dos sacerdotes acusados de pederastia en la diócesis de Chiclayo (Perú). A todo ello hay que sumarle la «persecución» del abogado de las presuntas víctimas y el nombramiento de un obispo «amigo».
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