El proyecto de Pablo es una novela de 170 páginas escrita para adolescentes a partir de 13 años, y también para padres, profesores o educadores que los acompañan. Su autor es Ángel Ubach, padre de seis hijos y psicólogo escolar en el colegio Reial Monestir de Santa Isabel en Barcelona. El libro nace de su experiencia acompañando adolescentes, cuyos problemas hoy a veces se parecen a los de un adolescente de hace 30 años, pero otras veces no.
– ¿Por qué escribió El proyecto de Pablo?
– Sentí la necesidad de llegar mejor a los adolescentes y, si era posible, llegar a más. Mi trabajo en los colegios me ofrece multitud de experiencias de lo más diversas. Veo que es mejor prevenir ciertas situaciones. Hacemos sesiones en el aula, formaciones a padres, tutorías con familias, y aún así todo es insuficiente para prevenir y ayudar a las familias.
– ¿En qué sentido la novela ayuda a la prevención?
– Es más fácil aprender a partir de lo que vive un personaje; sus problemas, situaciones, vivencias… Se entienden mejor con una narración que con una explicación teórica. El proyecto de Pablo ayuda a visualizar las consecuencias de cosas que, a ojos de un adolescente, podrían parecer inocuas. Está escrita para ellos, en un lenguaje sencillo y aborda las cuestiones que viven, escuchan o se cuestionan cada día: bullying, nuevas tecnologías, dudas sobre su identidad, etc.
– ¿En la novela solo hay cuestiones problemáticas?
– No, no. La propuesta positiva de la novela viene con modelos alternativos a los que nos rodean, distintos de aquellos que más seducen a los adolescentes (plataformas, redes sociales, influencers, etc. ). Muchos de esos modelos son poco recomendables.
El Proyecto de Pablo, en Amazon (12 euros en tapa blanda, 6,5 en Kindle).
– ¿Qué aporta la novela a padres y educadores?
– Es una herramienta muy útil para abordar problemas incómodos. Son temas que los adolescentes evitan plantear en primera persona. Pablo, el protagonista va escribiendo su relato de septiembre a junio. Eso facilita trabajar un tema al mes, sea en casa o en el aula. Aprendemos a escuchar, acoger, en definitiva, a acompañar a los adolescentes. Uno de los primeros lectores me dijo sobre uno de los personajes, “es el que a tantos nos hubiera gustado tener y el que nos gustaría ser, por eso no dejará a ningún lector al margen”.
– ¿Qué dicen los lectores por ahora?
– Me llegó un audio con, palabras textuales de quien me lo mandó, “la reseña más entrañable que vas a escuchar”. Efectivamente, fue así. Su hermana de 16 años decía emocionada que “hay como uno o dos capítulos del libro que ojalá pudiéramos aprender de memoria” y que se sentía súper identificada. Que un adolescente se identifique con los ejemplos e historias que se entrelazan en la novela es la mejor crítica que se me podía hacer.
– ¿Habrá segunda parte?
– Me estoy animando a escribir una secuela. Pero Pablo tendrá que esperar a seguir con su “proyecto”: ahora estoy con un libro de cuentos cargados de significado y claves de vida. Me apetecía probar algo distinto. Aunque viendo la acogida de los lectores, a lo mejor Pablo me pide que le haga caso antes, con el permiso de mi mujer y mis hijos, claro.
PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»
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