El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, aprovechó su intervención en la 79ª Asamblea General de las Naciones Unidas para lanzar una severa advertencia sobre lo que describió como ataques crecientes en todo el mundo contra la familia y los valores tradicionales, poniendo como ejemplo la blasfema y depravada ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos en París.
More Stories
Hospicios católicos en el Reino Unido se enfrentan al cierre después la aprobación de un proyecto de ley sobre suicidio asistido
Atacan a una fiesta de bodas cristiana en el centro de la India
Rezar el Rosario mejora la salud mental y reduce la depresión