La ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de París será recordada como el ejemplo más visible de la degeneración de Occidente, muy especialmente en la Unión Europea. El zenit de la iniquidad llegó con una representación blasfema de la Última Cena con draq queens.
More Stories
La Unión Budista de Bélgica defiende su reconocimiento como filosofía no confesional
El gobierno de Castilla-La Mancha desechó denunciar los planes pastorales de conversión de homsexuales
Kennedy promete implementar las políticas provida de Trump en el Departamento de Salud