Jesús García, de la Nota de Medjugorje: «Roma ha apuntalado el testimonio de millones de personas»

Si el fenómeno Medjugorge se conoce hoy en España, es en buena medida gracias a la labor de investigación de Jesús García. Con su libro  Medjugorje (Libroslibres), García presentó al público todo lo relativo a las «supuestas apariciones» de la aldea Bosnia sobre las que este 19 de septiembre el Vaticano se ha pronunciado a través del documento “La Reina de la Paz” Nota sobre la experiencia espiritual vinculada a Medjugorje. 

Poco después de la publicación del libro en 2009 -reeditado en 2021 con motivo de los 40 años del inicio del «fenómeno Medjugorje»- García llevó a cabo un documental, Medjugorje, la película, dedicado por entero a lo que considera «su vida». Con la publicación de un libro, un documental y habiendo peregrinado a la aldea bosnia en decenas de ocasiones, la de García es una voz autorizada para desgranar las implicaciones del último documento vaticano.

¿Es este un reconocimiento de las «supuestas apariciones»? ¿A qué responden las «contradicciones» o «aspectos problemáticos» mencionados en el documento de Doctrina de la Fe? ¿Qué consecuencias tendrá para los cientos de miles de peregrinos que acuden cada año a la aldea bosnia? Habla con Religión en Libertad para dar respuesta a estas y otras preguntas. 

-¿Qué supone para uno de los principales difusores de Medjugorje en España este documento?

-Sobre todo es un espaldarazo a la vida de gracia que se da en Medjugorje por parte del Vaticano, animando a los fieles a vivir esa gracia concreta que se vive en actualmente. Siempre digo que es una gracia concreta y actual porque algún día se terminará.

Y segundo, es un reconocimiento implícito a las apariciones. Porque si no fuesen verdad, o si fuesen una estafa, se condenarían. Y sin embargo, lo que ha hecho el Vaticano a través de esta nota que otorga el Nihil obstat a la experiencia espiritual es la argumentación utilizando mensajes de la Virgen, por tanto hay un reconocimiento implícito de que la naturaleza es sobrenatural. No lo quiere hacer explícito por algún tipo de prudencia, pero implícito sí que lo hay.

-Usted es consciente de que, como dice el documento, Medjugorje «ha cambiado la vida», tanto de los peregrinos como la suya propia. ¿Cómo sucede esto?

-El cardenal y prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe ha presentado el documento utilizando la frase de que en Medjugorje se da una experiencia del corazón. Creo que ese es el denominador común de los millones de peregrinos que han ido en los últimos 43 años y que han manifestado algún tipo de cambio espiritual en su vida, algunos más fuerte, otros menos, pero el denominador común es que ahí hay una experiencia de la gracia y eso al final es experiencia del corazón. Eso es inexplicable. Se puede testimoniar y vivir  pero no se puede explicar.

El bestseller de Jesús García, Medjugorje, está disponible en Libros Libres. 

Creo que lo que hemos hecho los que hemos ido allí hasta este Nihil obstat ha sido eso: testimoniar que hay un lugar en la tierra en que se hacen más evidentes, tangibles y perceptibles las verdades del cielo. Lo que ha hecho Roma ha sido apuntalar ese testimonio que tantísimos millones de personas han dado. Soterradamente, lo que implica es reconocer que esos peregrinos no estaban locos. Lo que se da es una experiencia del corazón que implica una serie de cambios, cambios que en muchos casos se alargan en el tiempo, son cambios buenos y positivos para la vida de fe, para la vida espiritual y para la vida de las personas.  

-Al comienzo de la Nota se valoran los «muchos elementos positivos» de los mensajes pero también se previenen de «contradicciones» o contenidos relacionados con intereses de los videntes. ¿Cuáles cree que son esas contradicciones o intereses personales?

-En la explicación se han referido a las confusiones a través de la información y las redes sociales sobre los videntes. Creo que esa confusión viene originada por el dinero. Medjugorje es un pueblecito de 400 habitantes que a día de hoy visitan más de un millón de personas de todo el mundo cada año. Creo que la confusión ha venido por querer malmeter el interés económico que puede promover un interés espiritual, cruzarlo con los videntes y sus familiares.

Recuerdo una catequesis que dio un franciscano en Medjugorje. Decía que en Medjugorje, junto con el monte de la cruz y el de las apariciones, también un tercer monte que se ha construido, y que es el monte del dinero, pero que el que sube al monte de la cruz y de apariciones no sube al del dinero y viceversa. Y es cierto.

En la naturaleza de las peregrinaciones hay una demanda muy fuerte de alojamientos, comida o bienes básicos y ahí se genera un interés económico de quien construye hoteles y todo lo que acompaña la industria de las peregrinaciones. Creo que las dudas que han podido surgir en torno a esto tienen que ver con que las familias de los videntes, al poco tiempo [de las apariciones], han construido casas de peregrinaciones, lo cual creo que no infringe ninguna ley de Dios ni humana. Al revés, responde a una demanda muy fuerte. Siempre digo que cuando he ido, prefiero dormir en una cama limpia a dormir un establo, como pasaba al inicio de las peregrinaciones, cuando los peregrinos dormían en cuadras de las casas.

-También se habla de «un lenguaje místico impreciso y, en definitiva, incorrecto» o «palabras no adecuadas». Son varios los «aspectos problemáticos» que se mencionan. La declaración vaticana ¿es un reconocimiento o cree que se queda a medias?

-Creo que va en la línea de comunicación de Roma desde hace unos años. Creo que es un reconocimiento implícito, no explicito y con la frase «aquí se aparece la Virgen». Es una manera de decir: esto está sucediendo.

Y sobre las dudas en algunas ocasiones en el leguaje de videntes o mensajes, el prefecto ha puesto un ejemplo claro citando a Santa Teresita del Niño Jesús, diciendo que cuando extraes los mensajes del contexto, puede generar confusión. Al fin y al cabo, los 6 videntes son unos chicos que en su día eran muy jóvenes, no tenían estudios, vivían en pueblo muy pobre, son de naturaleza o origen campesino y a lo mejor no han sido todo lo duchos que le gustaría a Roma al dar explicaciones.

Tráiler de `Medjugorje, la película´, de Jesús García: 

Pero más allá de eso, lo importante no es tanto la forma sino el fondo. Y en el fondo no ha habido error teológico señalado por parte del Vaticano en sus mensajes. Lo importante es  que hoy Roma ha hecho mucho más con lo que no ha dicho que con lo que sí. Al no haber condena, hay una aprobación implícita. Es un voto de confianza. El cardenal también ha explicado que en la comisión de investigación que ordenó Benedicto XVI, hubo una votación por los comisionados en que dieron por ciertas las apariciones de los 7 primeros días. No viene en la nota, pero lo ha contado así a los participantes.

-La Nota también subraya el «valor menor de las mismas apariciones frente al inmenso tesoro espiritual que es la Eucaristía». ¿Cree que el documento favorecerá un mayor emotivismo en Medjugorje o por el contrario anclará a los peregrinos en los sacramentos?

-Creo que lo que hace es bajar el suflé y centrar el tiro en la Eucaristía, que es lo que hacen los mensajes de Medjugorje, clarísimamente cristocéntricos. Hay un mensaje en que María le dice  a  los videntes que si tienen que elegir entre la aparición o la misa, que vayan a misa. De todas formas, el peregrino de Medjugorje, el que ya ha ido, esto lo tiene clarísimo. En mi primer viaje a Medjugorje iba con mucha inquietud, incluso morbosa, y en apenas dos horas, el tema de las apariciones pasó a un segundo plano y empezó a cobrar importancia la vida de la parroquia. Ahí hay una gracia concreta que te hace más sensible y perceptible a las gracias que suceden en la vida de los sacramentos. Al final, vas a Medjugorje y lo más probable es que no veas a un vidente, sino que te pasas siete días yendo a misa y rezando.

-Con la cantidad de relatos existentes, puede resultar curioso que el documento no mencione las manifestaciones de posesiones y liberaciones que se suceden en Medjugorje. ¿Cree que esto es un elemento que apoya lo que allí sucede o lo lastra?

-Ni lo apoya ni lo lastra. Es una realidad. Te cuento una anécdota. La semana pasada ha estado el cardenal Rouco en Medjugorje y en un momento dado, estando en un lugar en el Cristo resucitado, hubo un caso de posesión, de un endemoniado que se manifestó. Bueno, ante la sorpresa que puede suscitar el hecho en sí, lo que le explicaban al cardenal es que a Medjugorje va mucha gente con ese problema. Si tienes un problema de estos y no sabes a quién acudir en tu diócesis, pues les hablan de Medjugorje y van ahí a pedir la sanación o la liberación. Es cierto que en Medjugorje, con relativa frecuencia, puedes ser testigo de alguna manifestación demoniaca, es una realidad. El problema está en que es una realidad de la que no se habla, está como oculta, cuando es tan veraz como el propio Evangelio. Creo que viene más por el rechazo que causa en las personas que temen enfrentarse  a la existencia del demonio que al hecho en sí.

-¿Cómo gran conocedor del fenómeno, echa en falta la mención concreta de algo en el documento?

-Nada. La nota es un documento escrito y está todo perfectamente explicado. El que quiera entender el mensaje que hay entre líneas, lo entiende perfectamente. Me ha gustado muchísimo la explicación del cardenal, muy extensa, de casi dos horas, de esta declaración de Nihil obstat. Han explicado mucho más de lo que viene en el documento, han tocado todo lo polémico que hay en torno a Medjugorje, como el conflicto histórico desde hace mas de 100 años entre el clero franciscano y el diocesano, que muchas veces se ha utilizado para atacar a Medjugorje.

También se ha hablado de frailes que no han hecho bien las cosas. Fíjate. Hay un fraile que tuvo que ver con el comienzo de las apariciones que hoy está excomulgado por otros asuntos que no tienen nada que ver. Y se ha usado su nombre para atacar a Medjugorje, pero no el de los cientos de frailes obedientes. Roma lo ha hecho muy bien. Es una explicación para el hombre de hoy. El hombre de hoy necesita comunicación y transparencia. La Iglesia tradicionalmente ha sido una institución bastante opaca en comunicación y creo que hoy han dado un paso adelante en transparencia: ahora ya no hay ninguna duda sobre la bondad de la experiencia espiritual de Medjugorje.

PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»