JK Rowling, autora de la saga literaria más exitosa de los últimos tiempos, ha vuelto a demostrar que no piensa ceder ante el totalitarismo con capa democrática que impone la ideología de género. Rowling, que sostiene algo tan elemental como que la biología determina si una persona es hombre o mujer, puede cometer un delito si afirma tal cosa en Escocia tras la entrada en vigor de una ley. Ella ha pedido a la policía que la detenga.
More Stories
El Chesterton de Sierra Leona: J. Kanu, el hombre que pone en práctica el distributismo en África
Las noches oscuras del misionero «Terminator»: «No te hacen perder la fe, la ponen en su fundamento»
Descienden un 32 % las denuncias por abusos a menores contra el clero católico en EE.UU