En medio de la complejidad de la vida tokiota, Junko Kusanagi, residente de 49 años, comparte su conmovedora travesía hacia la fe católica, impulsada por la enfermedad de su esposo de 53 años.
En medio de la complejidad de la vida tokiota, Junko Kusanagi, residente de 49 años, comparte su conmovedora travesía hacia la fe católica, impulsada por la enfermedad de su esposo de 53 años.
More Stories
Elon Musk publica un poema sobre el vacío del ateísmo; «quizá la religión no está mal», escribe
Almodóvar acertaba: la verdadera razón de la cruzada pro eutanasia de «La habitación de al lado»
Doctrina de la Fe pide a los obispos filipinos que impidan la conmemoración de unas supuestas apariciones marianas en Lipa