Mientras la más alta autoridad de la Iglesia Católica calla, altos cargos de los gobiernos de Irán y Turquía, junto con otras personalidades religiosas musulmanas, se han pronunciado en contra de la parodia de la Última Cena realizada en la inauguración de los Juegos Olímpicos de París.
More Stories
La Iglesia Católica crece día a día en Estados Unidos
El debate sobre el problema sinóptico continúa
Las ONGs católicas españolas piden la condonación de la deuda a los países que no pueden pagarla