¿Un mes de ejercicios en verano? 5 razones para acudir a la convocatoria del Burgo de Osma (Soria)

El verano es un tiempo propicio en la Iglesia para actividades que no se pueden realizar durante el ajetreo del curso. Es el tiempo por excelencia de los campamentos, muchos jóvenes se pagan sus viajes para ir a evangelizar a países de misión «ad gentes» o ayudar en campos de trabajo, las parroquias y movimientos tienen sus encuentros de formación, de familias, de convivencia…

Desde hace tres años el Burgo de Osma (Soria, España) se convierte en «capital de espiritualidad» donde se congregan sacerdotes, religiosas, seminaristas y seglares venidos de diversos lugares de España y del extranjero para responder a la convocatoria que realiza el Instituto del Corazón de Cristo (icorazondecristo.org) en la Casa de Espiritualidad de esta ciudad emblemática castellana del 10 de Julio al 10 de Agosto.

Este año, 24 ejercitantes venidos desde Estados Unidos, Argentina, Venezuela, Chile, Portugal y Francia y de diversos lugares de España (Madrid, Toledo, Getafe, Sevilla, Córdoba y Alicante) se han convertido en testigos de esta experiencia de gracia que es el Mes de Ejercicios de San Ignacio.

El Mes de Ejercicios está dirigido por los sacerdotes, José María Alsina, de la archidiócesis de Toledo y Manuel Vargas, de la diócesis de Getafe. Ellos nos ofrecen 5 razones que explican el éxito de esta convocatoria:

1.- Es una tanda de Ejercicios «católica»: es decir; mixta (de hombres y mujeres) abierta a sacerdotes, religiosas, seminaristas y seglares, venidos de diversos lugares y ambientes eclesiales. Es una experiencia eclesial muy rica en el que todos los que participan tienen la oportunidad de compartir un mismo camino con personas de diversos estados, experiencias eclesiales, edades y nacionalidades.

2.- Es la experiencia entera de los Ejercicios, siguiendo íntegramente el método de San Ignacio, en el que solo se puede participar si se está dispuesto a adentrarse en los 30 días de retiro. El reto de pasar 30 días de silencio se presenta como una oportunidad muy particular para hacer elecciones importantes o para proceder a una verdadera reforma de vida.

3.- Una de las claves de los Ejercicios ignacianos es el acompañamiento espiritual personalizado. El disponer de dos sacerdotes dedicados durante estos 30 días a los Ejercicios permite tener cada dos días una entrevista personalizada en la que se acompaña el camino que cada uno realiza en los Ejercicios.

4.- El Mes de Ejercicios del Burgo de Osma tiene la perspectiva de adentrar en la espiritualidad ignaciana del discernimiento, la contemplación y la elección a la luz del Corazón de Cristo. Es por la fuerza del Amor de este Corazón de Jesús y por el deseo de Amar a este Corazón que el ejercitante es atraído a elegir el «mas», aquello que conduce «a la mayor gloria de Dios» en la propia vida al que quiere llevar San Ignacio.

5.- El enclave del Burgo de Osma y de su Casa de Espiritualidad tienen un particular atractivo. El Burgo de Osma es una ciudad castellana llena de significado histórico, con un ambiente de verano familiar y tranquilo, un entorno de naturaleza muy agradable por el que pasear en medio del silencio, con noches frescas, y con una Casa de Espiritualidad muy bien preparada, amplios espacios y un excelente servicio en la casa.

El pasado 10 de Julio finalizaba la tanda de Ejercicios de este año con la Misa presidida por el obispo de Soria, Mons. Abilio Martínez quien animó a seguir realizando esta convocatoria en los próximos veranos. A partir del mes de octubre se abren las inscripciones para el Mes de Ejercicios del 10 de julio al 10 de agosto del próximo año 2025. Quien desee información puede escribir a ejerciciosespirituales@icorazondecristo.org.

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