A principios de enero, la organización de padres en defensa de la educación libre de adoctrinamiento en Estados Unidos Parents Defending Education ha publicado una encuesta de calibre nacional en torno a los principales aspectos que atañen a la educación de los alumnos a lo largo de este 2025.
La encuesta -se puede leer por completo– arrojaba luz sobre cuestiones genéricas de la educación como el papel del estado y la administración o su financiación, pero también sobre el papel que las políticas woke -teoría crítica de la raza, lobby LGBT, feminismo, etc- deben tener en la escuela.
La encuesta, realizada por CRC Research a 1000 padres con hijos menores de edad, arrojaba lo que a grandes rasgos parece un rechazo generalizado de las familias a estas políticas.
No suprimir el «0» en las notas
Así, siete de cada diez padres se oponían a que las escuelas adopten la llamada calificación de equidad, rechazando de este modo que la escuela suprima el 0 como nota en alguna prueba, aún a sabiendas de que, por lo general, los estudiantes afroamericanos obtienen peores notas. Es decir, los padres afroamericanos también están en contra de que se discrimine positivamente a sus hijos y quieren que se refleje su nota de forma precisa, sea un 10 o un 0.
Los castigos, iguales para todos
En el mismo sentido, el 82% de los encuestados mostraron su rechazo a otras políticas concretas de teoría crítica de la raza en la escuela, como que la raza deba tenerse en cuenta a la hora de aplicar medidas disciplinarias sobre los estudiantes. “El 85% de los padres blancos, el 77% de los padres negros, el 69% de los padres asiáticos y el 79% de los padres hispanos no están de acuerdo en que los administradores escolares deban tener en cuenta la raza de un estudiante al decidir cómo sancionarlo después de una infracción”, se lee en los resultados.
Género: transparencia, deportes sin trans y baños separados
La encuesta también abordó la cuestión de género. Preguntados por si los profesores, entrenadores o en general el personal escolar debe ocultar a los padres información sobre la llamada identidad de género en los alumnos, el 75% de los padres mostraron su oposición.
Una cifra similar a la del rechazo mostrado por las familias a que los varones biológicos que se identifican como mujeres puedan participar en equipaciones o competiciones femeninas. Un 78% de padres encuestados mostró su oposición.
En sentido similar, el 77% de los padres encuestados se opusieron a que los varones biológicos identificados como mujeres puedan utilizar los baños y vestuarios femeninos y viceversa, que mujeres biológicas puedan usar los masculinos.
Conclusión: «Que las escuelas vuelvan a lo fundamental»
Para Nicole Neily, presidenta de Parents Defending Education, los resultados son contundentes. A su juicio, “ponen de relieve que los padres están insatisfechos con una serie de elementos del sistema educativo estadounidense moderno y que existe un amplio consenso en cuanto a que es hora de que las escuelas vuelvan a lo fundamental”.
“Esta encuesta muestra una oposición abrumadora a que el personal escolar oculte a los padres información sobre la identidad de género de sus hijos en la escuela. Esto es importante porque las políticas propagadas por activistas permiten -y a menudo exigen- el engaño deliberado a los padres por parte del personal escolar si eso es lo que quiere el menor. Es reconfortante ver la confirmación de que la gente piensa que esta tendencia omnipresente de facilitar las transiciones de género a espaldas de los padres es una locura y debe detenerse”, agregó Erika Sanzi, responsable de difusión de la organización.
PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»
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