21/12/2024

El obispo de Kansas City confirma que no hay signos de corrupción en el cadáver de Sor Guillermina

Sor Guillermina del Santísimo Rosario, en el siglo Wilhelmina Lancaster, fundadora de las Benedictinas de María Reina de los Apóstoles (guiadas espiritualmente por sacerdotes de la Fraternidad de San Pedro), falleció el 29 de mayo de 2019 a los 95 años de edad con fama de santidad.

Posteriormente, la comunidad decidió trasladar sus restos mortales al interior de la iglesia de su convento en Gower (Misuri, Estados Unidos). Por ese motivo fue desenterrada el 28 de abril de 2023, y para sorpresa de las religiosas se encontraron con un cuerpo incorrupto, a pesar de que no había sido embalsamado y de que el féretro de madera tenía una grieta por la que habían entrado la humedad y el moho, que cubría el cadáver.

Vídeo que muestra el cuerpo incorrupto de Sor Guillermina.

La comunidad procedió a exponer a su fundadora a la veneración pública con una máscara de cera cubriendo el rostro, levemente deteriorado. Llegaron hasta veinte mil personas en los primeros días, iniciándose una devoción que excede la de los fieles que acuden habitualmente a misa tradicional en el monasterio.

El 24 de mayo de 2023, el obispo de la diócesis de Kansas City-St. Joseph, James V. Johnston, encargó el estudio del cuerpo a un equipo de expertos dirigidos por un doctor en Patología y compuesto por otros tres médicos, uno de ellos antiguo forense de un condado de Misuri. También estudiaron el féretro y entrevistaron a las personas responsables de su inhumación y exhumación.

El pasado 22 de agosto, el obispo hizo público el resultado de las investigaciones, que confirman las primeras impresiones.

Juan Pablo II bendice en 1998 a Sor Guillermina.

El prelado recuerda que la monja fue enterrada «sin embalsamar ni ningún otro tratamiento sobre su cuerpo» en un ataúd de madera «no sellado», y que al ser extraído de él cuatro años después «no presentaba los signos de descomposición que existirían normalmente casi cuatro años después del enterramiento en las condiciones descritas», a pesar de que «el forro del féretro se había deteriorado completamente» y de que las condiciones de enterramiento «no protegían contra la descomposición».

Los médicos consideran el estado de Sor Guillermina «enormemente atípico para el periodo de cuatro años transcurrido desde su muerte, especialmente dadas las condiciones ambientales y el estado de otros objetos».

Asimismo se realizó un estudio del suelo, que no reveló «elementos inusuales que hubieran podido influir sobre el cadáver cuando fue exhumado».

Monseñor Johnston precisa en cualquier caso que la incorruptibilidad no es por sí sola un signo de santidad, y que «actualmente no está previsto iniciar una causa de canonización de Sor Guillermina», cuya historia confía, en cualquier caso, que «siga abriendo los corazones al amor de Nuestro Señor y Nuestra Señora».

Procesión del Domingo de Ramos de la comunidad fundada por Sor Guillermina.

Sor Guillermina recibió la inspiración de entregarse a Jesucristo el día de su Primera Comunión, e hizo los votos en 1944 en las Hermanas Oblatas de la Providencia. Fundó las Benedictinas de María Reina de los Apóstoles en 1995, y sus constituciones recibieron la aprobación definitiva en 2014.

PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»