“El respeto de todas las religiones sean lo falsas o perversas que sean no es más que la orgullosa negación del respeto debido a la Verdad. Para amar sinceramente lo verdadero y el bien, es necesario no tener ninguna simpatía hacia el error y el mal. Para amar verdaderamente al pecador y contribuir a su salvación, es preciso detestar el mal que está en él.”
R.P. Reginald Garrigou-Lagrange, O.P.
PUBLICADO ANTES EN CATOLICIDAD
More Stories
El cardenal Pizzaballa, en Jerusalén, tranquiliza sobre los cristianos de Gaza: «Todos están bien»
Cristianos de paz
Revelamos lo que hará León XIV en los próximos días… y otro gran evento