Un mes después de la publicación de la declaración vaticana Fiducia supplicans sobre la bendición de parejas homosexuales e irregulares, continúan las reacciones de autoridades eclesiásticas de todo el mundo marcadas en muchos casos por una interpretación opuesta del texto.
La de Guinea Ecuatorial ha sido una de las últimas conferencias episcopales en pronunciarse a través de una declaración conjunta firmada fechada el pasado 22 de enero. En cuanto a autoridades particulares, la mañana de este miércoles 24, el obispo de Almería, Antonio Gómez Cantero, se refirió a Fiducia supplicans durante el encuentro con la prensa celebrado con motivo de la festividad de San Francisco de Sales en la casa sacerdotal Maestro Ávila. También el arzobispo de Granada Gil Tamayo.
Guinea Ecuatorial, «contra Fiducia»
En el caso de los obispos de Guinea, tras una extensa mención de la «doctrina primigenia» de la Iglesia sobre el matrimonio, la sexualidad y las bendiciones, concluyeron que «ningún sacerdote de la Iglesia católica en guinea ecuatorial puede bendecir a una pareja del mismo sexo«.
Los obispos argumentaron que su postura «contra Fiducia supplicans» no pone en duda su «comunión» con el Papa Francisco.
Sin embargo, los guineanos se homologaron al rechazo del conjunto de conferencias episcopales africanas en defensa de «valores culturales fundamentales» hoy atacados como la sacralidad de la vida, el matrimonio y la familia o la primacía de la comunidad en detrimento del individuo.
En este sentido, los obispos destacaron que la «inclinación homosexual y prácticas afines» se están configurando como «una corriente de expansión mundial» junto con la ideología de género, «una nueva forma de colonización que ciertas potencias y lobbies mundiales quieren utilizar para destruir nuestros valores».
Por ello, y recordando que la Iglesia «rechaza el pecado y abraza al pecador», los obispos concluyeron que «las personas que viven estas experiencias [homosexuales] no podrán recibir bendición alguna» al no representar esta práctica «ningún valor» ni aportar «ningún bien para nuestros pueblos y culturas».
El comunicado concluye subrayando que «las parejas del mismo sexo y todas las prácticas afines suponen una seria amenaza contra la institución matrimonio familiar y los valores que encierra, que constituyen la columna vertebral para todas las sociedades del mundo. Por consiguiente, la bendición de parejas del mismo sexo significaría `esterilizar la humanidad´. Urge a la iglesia recuperar el anuncio del Evangelio de la vida, de la dignidad de toda persona creada a imagen y semejanza de Dios y del recuerdo de la voluntad divina: `sed fecundos y multiplicaos´».
Gómez Cantero: No bendecir «estaría muy mal debiendo obediencia»
En el caso del obispo de la diócesis española de Almería, Antonio Gómez Cantero, arremetió en el desayuno con la prensa de este miércoles contra quienes «crucifican por todos los lados» al Papa Francisco en relación a Fiducia.
«Nunca he visto tanta oposición en un Papa tan públicamente. Nunca se ha hecho, pero a este Papa se le crucifica por todos los lados, por sectores a los que, por lo que sea, les interesa», mencionó.
Preguntado por el documento, el obispo señaló que si Francisco, que tiene «un montón» de asesores, «quiere dar un paso más», hay que «estar con el Papa».
«Hay sectores que con un Papa están a matar y dice que al Papa hay que defenderle, pero cambia el Papa y dicen ´¡ah no, a este no! Yo me pregunto: «¿entonces, qué es lo que tú defiendes? ¿Defiendes que el Papa es el sucesor de Pedro o defiendes tu ideología personal?», planteó.
El obispo advirtió de que siempre «habrá cosas que nos gusten más o que nos gusten menos», pero que nos exigen «una conversión del corazón». También dijo que la «tradición es viva y se mueve» y que «siempre ha habido cosas, a lo largo de la historia, que han generado sangre entre los teólogos, aunque no había medios de comunicación como ahora». Algunos de esos cambios «escandalizaban a la gente» pero «después no pasó nada», opinó.
Por ello, el obispo ha advertido de que si algún sacerdote le comunicase su negativa a impartir las bendiciones recogidas en Fiducia, estaría «muy mal viniendo de un sacerdote que le debe obediencia al obispo y, por tanto, también al Papa».
«A veces tenemos que callarnos y mordernos la lengua, porque no todas las cosas gustan, pero esto es bonito. Es un gesto de misericordia, que es lo que más nos tiene que mover. La misericordia está por encima de la ley, lo dice San Pablo y lo dice Cristo, y la vida de Cristo es misericordia, sobre todo misericordia», concluyó.
Gil Tamayo: «No bendeciré uniones, bendeciré personas»
También durante un encuentro con periodistas de Granada, el arzobispo de Granada advirtió de que, siguiendo «fielmente» lo indicado por el Papa, no va a bendecir parejas homosexuales. «No voy a bendecir ni una unión homosexual» ni similar, «yo voy a bendecir a la persona» sin que haga falta «una ceremonia», declaró Gil Tamayo.
El arzobispo de Granada ha defendido que la archidiócesis estará «observando fielmente lo que señala la Santa Sede» en Fiducia supplicans y en la posterior nota aclaratoria del cardenal Víctor Manuel Fernández.
No obstante, Gil Tamayo ha reiterado el «respeto exquisito» por el Papa Francisco y que van a reforzar la «comunión» con él, la doctrina de la Iglesia sobre «el verdadero matrimonio y las uniones irregulares» evitando «toda confusión y buscando el bien de los fieles«.
Obispos eslovacos: «Solo si los solicitantes aceptan el significado»
La Conferencia Episcopal de Eslovaquia ha emitido una serie de orientaciones pastorales para la aplicación del documento vaticano.
Una de las primeras es que, permitiéndose la bendición a parejas irregulares, solo podrá concederse «después de haber informado verazmente a los solicitantes sobre el verdadero significado y propósito de esta bendición». Y en el caso de que el sacerdote no halle «la comprensión y aceptación» de este significado por parte de los solicitantes, los obispos instan a «no conceder la bendición», incluyéndoles en su lugar en sus oraciones.
«Es una petición de paz, salud y otros bienes y al mismo tiempo la libertad de todo lo contrario al Evangelio en la vida de la persona, así como petición de fortalecimiento para vivir según la voluntad de Dios«, matizan los obispos eslovacos.
A continuación, subrayan que el sacerdote que «tras su discernimiento y en su responsabilidad ante Dios» conceda tales bendiciones «a los individuos», deberá hacerlo evitando «cualquier atisbo de impresión de que se trata de aprobar, legalizar o poner a la unión irregular en el nivel de un matrimonio sacramental».
También recuerdan que al ser una bendición pastoral, «no puede darse dentro de los ritos litúrgicos, ni con vestiduras litúrgicas ni en un lugar preeminente de un edificio sagrado o frente al altar». También que debe ser «breve, sencilla y concisa, sin ceremonia».
PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»
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