Se suceden los bombardeos en Gaza por parte del ejército israelí, quien anoche atacó los barrios de al-Shujaiya y al-Zaytoun. Allí se encuentra la parroquia católica de la Sagrada Familia, que alberga a más de 500 desplazados.
La comunidad católica de Gaza está cada vez más decidida a no marcharse hacia el sur, como ordena el ejército israelí. Desde hace unos días, numerosas personas se refugian en el interior del recinto parroquial de la Sagrada Familia, la única parroquia católica de la Franja. Otros desplazados están alojados en la iglesia ortodoxa griega de San Porfirio.
En las oraciones del Papa
Las últimas cifras, facilitadas por la ONU, hablan de 2.750 palestinos muertos y 9.700 heridos. Mientras que las víctimas israelíes son 1.300 y 3.621 heridos. En Gaza, más de un millón de personas están desplazadas, prácticamente la mitad de la población.
Precisamente, emoción y agradecimiento fue lo que provocó la llamada que anoche les hizo el Papa Francisco a los fieles de Gaza. «El Santo Padre quiso impartir su bendición a todos, nos aseguró que estamos en sus oraciones y que conoce el sufrimiento que estamos padeciendo«, comenta la hermana Nabila Saleh, quien habló directamente con el Papa.
La hermana Nabila Saleh cuenta con emoción a Agenzia Sir la llamada telefónica del Papa a la parroquia latina de Gaza. «El padre Yusuf me llamó y me dio su número de teléfono para que pudiera hablar directamente con el Pontífice, ya que no habla bien italiano», comenta la hermana.
«El Santo Padre quería saber cuántas personas se alojan dentro de las estructuras parroquiales. Hay unas 500, entre enfermos, familias, niños, discapacitados, personas que han perdido sus casas y todas sus posesiones. Los cristianos están decididos a permanecer en la parroquia; donde rezan continuamente el Rosario, hacen adoración eucarística y donde también acogen a familias musulmanas», añade.
«El padre Yusuf y yo le dimos las gracias al Papa en nombre de toda la comunidad y le dijimos que ofrecemos nuestros sufrimientos por el fin de la guerra«, comenta la hermana, quien destaca el «auxilio de la providencia». «Ayer por la mañana justo bautizamos a un niño. Le pusieron el nombre de Gabriel, el ángel de la buena noticia, el mensajero de Dios», dice.
Puedes ver aquí una intervención reciente del párroco de Gaza.
«Además hemos recibido comida; dátiles y pan de una asociación de Kuwait. También ayer, la parroquia recibió la visita fraternal del párroco ortodoxo de Gaza, el padre Silas, que trajo saludos del obispo greco ortodoxo de Gaza, monseñor Alexios. Esto demuestra que, incluso en tiempos de prueba, existe unidad y cooperación entre todos los cristianos de la Franja», asegura.
PUBLICADO ANTES EN «RELIGIÓN EN LIBERTAD»
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