Desde 2012, Malí enfrenta una crisis multidimensional. En una entrevista, Mons. Jonas Dembélé, presidente de la Conferencia Episcopal del país africano, destaca la violencia yihadista, desplazamientos masivos y restricciones religiosas. La Iglesia ayuda a desplazados y fomenta el diálogo interreligioso a través de Cáritas y escuelas. La nueva Constitución ofrece esperanza, pero la paz exige acción conjunta, diálogo y oración.
More Stories
¿El demonio tiene derechos sobre nosotros? Dos exorcismos de San Francisco de Paula prueban que no
Los visitantes de las catedrales, ¿son turistas o peregrinos?: Un interesante y crucial debate
Francisco: la armonía y sinergia entre fieles de credos distintos contribuye al progreso moral y espiritual